Con esto, los de Redmond confirman que siguen queriendo alejarse del concepto de tableta "iPad", mezclando la comodidad de un portátil y la versatilidad de una tableta en estos convertibles. El objetivo: demostrar que en Apple están equivocados cuando quieren separar eso en dos dispositivos diferentes. Ahora bien... ¿realmente se están separando?
Comparaciones con Apple en prácticamente todo
Una de las cosas que más ha despertado mi curiosidad durante el evento y en los datos oficiales de presentación es que el nuevo Surface Pro no deja de compararse con el iPad Pro. La batería dura un 20% más que el iPad Pro, el procesador puede llegar a ser 1,7 veces más rápido que el iPad Pro...Obviamente Apple es la competencia a vencer, y por lo tanto los argumentos para que nos saltemos de plataforma no van a faltar. Y el hecho de que el nuevo Surface Pro consiga velocidades mayores que las de un iPad Pro o que su Pen tenga menos lag va a hacer que en Cupertino se pongan las pilas, así que nada mejor que una sana competencia.
Pero cuando quieres diferenciarte de una gama o formato concreto de dispositivos, no sé si lo mejor es compararse continuamente con ella. Algo parecido ha ocurrido por ejemplo en Huawei, cuyo nuevo portátil no ha dejado de compararse con el peso y la delgadez del MacBook de 12 pulgadas en las diapositivas de presentación
Esto señala que en el mercado, aunque los fabricantes vayan tirando por sus propios caminos tal y como la propia gama de convertibles demuestra, Apple sigue siendo la compañía a la que mira todo el mundo para ver cómo innova. Y el próximo movimiento lo va a tener esta misma compañía, cuando presente sus novedades en la WWDC. Y en ellas, me atrevo a decir que pocas comparaciones con la competencia vamos a ver.