6 razones para no beber cerveza en jarra congelada.


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Desgraciadamente en pleno verano no escasean aquellos locales en los que nos ofrecen cervezas servidas en jarras congeladas. Mientras que en esos mismos lugares habitualmente se trata al vino con cierto mimo (como siempre hay excepciones...) sirviéndolo en diferentes copas y a temperaturas más o menos adecuadas, nuestra querida cerveza sigue encontrándose un muro de desconocimiento no solo por parte del hostelero sino en muchas ocasiones también por parte del consumidor.

Por ello, hoy, tratando de desterrar un poco más lejos ese mito, os dejamos 6 razones por las cuales tomar una buena cerveza en un vaso congelado está lejos de ser una experiencia recomendable.

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1.La primera y también la razón más evidente es que al servir la cerveza a una temperatura casi glacial impedimos que ésta ofrezca toda la gama de aromas y sabores que la caracterizan. A temperaturas más bajas los receptores olfativos perciben menos sustancias volátiles y las papilas gustativas dan una señal menos intensa por lo que tomar cerveza muy fría se traduce en una experiencia mucho más plana.

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2.En un frigorífico el hielo pegado a la copa absorbe los sabores de todo lo que le rodea por lo que servir una copa con sabores de verduras, carne y demás alimentos adheridos a la pared no es una experiencia precisamente placentera.

3.A medida que el hielo pegado a la pareddel vaso se va calentando y se va derritiendo se incorpora a la cerveza aguándola.

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4.Los cristales de hielo adheridos a las paredes de los vasos provocan problemas a la hora de formar la espuma.

Seguro que no os apetece encontraros con esto...
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... ni con esto.
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5.Servir la cerveza a temperatura más bajas provoca una mayor retención de CO2 y por lo tanto al tomarla tendremos un trago que llena mucho más.

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6.Además de todo lo anterior, el contraste térmico sufrido por el vaso al sacarlo del congelador y someterlo a temperaturas mucho más altas, tanto por la cerveza como por el propio calor ambiental, a la larga nos da muchas posibilidades de romper nuestro vaso favorito.

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A continuación tenéis un video de la Brewers Association estadounidense en el que explican un poco por encima algunas de estas razones. Está en inglés pero se entiende bastante bien y también podéis poner subtítulos que os ayuden a entenderlo.




Dicho todo lo anterior, hay una única excepción en la que un vaso congelado puede ser incluso útil y es cuando uno tiene que tomar cualquiera de esos refrescos que venden algunas cerveceras y quiere minimizar todos esos sabores poco agradables e incluso aguarlos ;). Así que ya sabéis, para todos los demás casos, pedid que os sirvan vuestra cerveza en un vaso a temperatura ambiente.

Salut!