El lúpulo cocinero: cebollas de Bamberg.


Después de mucho tiempo sin publicar en la sección de El Lúpulo Cocinero quisimos aprovechar la excusa brindada por el FFdA del pasado fin de semana para lanzarnos de nuevo a la cocina y marcarnos una receta típica de Franconia, región situada en el norte de Baviera, Alemania.


Hablo de las típicas cebollas de Bamberg, o en alemán Bamberger Zwiebeln, una receta no excesivamente complicada (aunque requiere su tiempo y elaboración) y en la cual utilizamos cerveza rauchbier como ingrediente y también como maridaje. Por supuesto la receta que hicimos se trata de una de tantas formas posibles de cocinarlas, ya que según donde busquéis podréis encontrar un tipo u otro de carne para el relleno, más o menos grasa…

Así que sin más, a continuación os dejo la receta.

- Ingredientes (para unas dos personas) -


- 2 cebollas grandes.
- Mantequilla.
- Perejil.
- Mejorana o en caso de no encontrar podéis utilizar orégano.
- Nuez moscada.
- 250 g de carne picada de cerdo.
- 1 huevo.
- Un par de rebanadas de pan duro remojadas en leche.
- Sal y pimienta.
- Unos 250 ml de caldo de carne.
- Unos 25 cl de cerveza rauchbier (en nuestro caso Schlenkerla Märzen).
- Un par de cucharadas de harina.
- 4 lonchas de panceta ahumada (o también podéis utilizar bacon ahumado).

- Elaboración -

1.Limpiamos las cebollas, cortamos una especie de tapadera con la parte superior y también cortamos la base para que tenga un buen asiento. A continuación vaciamos las cebollas con una cuchara parisina o algo similar. Aunque dependerá del tipo de cebolla y el grosor de cada capa, con que dejéis dos capas bastará para alojar dentro la mezcla y que no se escape al cocinarlas.

2.Picamos lo que hemos sacado de dentro de las cebollas y sofreímos en una sartén con mantequilla hasta que la cebolla quede transparente. Añadimos mejorana seca y un poco de perejil picado a la sartén y retiramos del fuego.

4.En un bol a parte mezclamos la carne picada con la cebolla sofrita, el huevo y el pan remojado con leche y la mitad de la panceta picada previamente. Mezclamos bien con las manos y añadimos sal, pimienta y nuez moscada al gusto.

5.Rellenamos las cebollas con la mezcla y las ponemos dentro de un recipiente con tapa apto para el horno (nosotros utilizamos una cazuela de barro). En ese recipiente añadimos medio vaso de caldo de carne y tapamos.

6.Cocinamos las cebollas al horno a 180ºC durante 45-60 min, dependiendo del tamaño de las cebollas. Durante la cocción iremos comprobando el caldo, si hace falta se añade más a media cocción.

7.Una vez cumplido el tiempo añadimos la cerveza y cocinamos en el horno otros 30 minutos.

8.Tras esos 30 minutos lo sacamos del horno y reservamos las cebollas. En el mismo recipiente (si habéis utilizado una cazuela de barro, sino pues en una olla) añadimos un poco de harina previamente disuelta en un poco de agua fría y cocinamos al fuego unos minutos para que se haga la harina. Vamos removiendo muy bien hasta que la salsa espese, quedando ligeramente untuosa. Si la salsa está un punto amarga podéis corregir con un poco de azúcar moreno y removerlo hasta que se integre en el conjunto. También corregimos de sal y pimienta.

9.Finalmente freímos bien la panceta que no habíamos utilizado y la ponemos encima de cada cebolla. Servimos las cebollas en plato hondo con un poco de salsa y espolvoreamos un poco de perejil recién picado por encima.


Si os apetece podéis acompañar las cebollas con sauerkraut (chucrutpara los amigos), un poco de puré de patatas y mostaza dulce. Para beber, por supuesto, nada mejor que tomar la misma cerveza con la que hemos cocinado, que en nuestro caso fue la magnífica y ahumadita Schlenkerla Märzen.

Solo nos queda animaros a que os atreváis con esta receta, muy resultona y pese a los  numerosos pasos y el tiempo de cocción es bastante sencillita. Ah, y por supuesto, ¡Guten appetit!¡Prost!