#FFdA7 o cerrando el círculo vital.


Parece que fue ayer cuando l’amic Joan Birraire nos convocó por primera vez a aquella interesante (y un poco exhibicionista también… ;-) ) propuesta del Finde Fondo de Armario o #FFdA para los más “moernos”. Desde entonces, y repitiendo cada seis meses, han pasado la friolera de tres años alcanzando así esta séptima edición. Ahí es nada… Molt gran Joan!


Para esta edición no puedo evitar echar la vista atrás ya que en aquel junio de 2012 en el que celebrábamos la primera edición del #FFdA, mi situación vital era bastante similar a la actual. La reina Lúpula estaba lejos de casa, cumpliendo con esa vida nómada e inestable de “profe” interino que nos hace recorrer los rincones más recónditos de la geografía levantina. Pero de repente esa crisis que tanto ha azotado a todos en general (y al sector público en particular…) y que nos obligó a hacer parón hasta este año, parece que nos ha querido dar un respiro aunque como contrapartida se haya llevado de nuevo lejos de casa a mi compañera de vivencias vitales, también las cerveceras.

El primer FFdA fue en Sant Mateu, ahora es en Benicarló, dos poblaciones cerca de la frontera entre Castelló y Tarragona y a pocos kilómetros una de la otra... pero a más de 180 km de casa de lunes a viernes. En lo cervecero, desde aquel 2012 no hemos dejado de compartir cervezas, algunas del “fondo de armario” para este mismo pretexto que hoy nos ocupa o para otras celebraciones especiales. Y hoy, pensando en como rendir un homenaje a aquel inicio de #FFdA y también esperando cuadrar ese círculo vital con unas perspectivas laborales y también personales algo más estables y más cortas en la distancia, me he decidido por algo que creo que homenajea bien aquel fin de semana iniciático en compañía de quien más amo y admiro.

Qué lejos queda esto... ¡Y qué gratos recuerdos!

Hace 3 años disfrutábamos de la Agullons Barrica 2011de la foto anterior acompañando unos magníficos quesos y embutidos artesanos en un placentero brunch dominical. Esta vez, en un paraje incomparable como es la Tinença de Benifassà, rodeados de pinos, carrascas, del precioso embalse d'Ulldecona y en definitiva de toda esa naturaleza que tanto necesito, nos montamos un picnic con un homenaje del genial Armand a Tomme d’Arthur, respectivamente los maestros cerveceros de la belga 3 Fonteinen y la estadounidense Lost Abbey. Etiquetada como Armand & Tommyse trata de una tirada limitada que vendieron en la primera edición del Sour & Bitter Festival que tuvo lugar en Copenhagen en 2012, elaborada mezclando una lámbic de 3 Fonteinen de 2008 con una lámbica de Boon con 4 años. Por lo tanto, y sin contar los años en sus respectivas barricas, la botella debe tener algo más de 3 años embotellada, de los cuales se ha tirado prácticamente ese mismo tiempo a buen recaudo en mi bodega.


Al igual que en 2012, nos volvimos a marcar un acompañamiento con embutidos y quesos artesanos espectaculares provenientes del Bages (pura casualidad, Joan...) regalo de l'amic Albert y que desde aquí aprovecho para agradecérselo enormemente.


Para llevar este ágape a una escala casi celestial quisimos sumar mi tan admirada Struise Pannepot, cerveza que por mucho que pasen los años y por muchas cervezas que descubra sigue estando entre mi top 10. Pero evidentemente un #FFdA tiene sus “normas”, así que deschapamos una Struise Pannepeut 2008, botella con la friolera de 7 años a sus espaldas, la misma cifra que corona a este #FFdA. ¿Casualidad? ;-). Y para acompañarla, ¿qué mejor que un paté hecho con la misma Struise Pannepot?


Tras el festín anterior y para cerrar el fin de semana (y también “el armario” hasta nueva excusa) de la mejor manera posible, nos decidimos por la Popairas, una Barley Wine envejecida durante 6 meses en barrica de vino que alcanza los 11% de alcohol. Se trata de una colaboración entre las catalanas Popaire y As, como bien anticipa el juego de palabras de su nombre (pronunciado en catalán la palabra “popaires” - pescadores de pulpo - sonaría como el nombre de la cerveza). Me hice con ella en Mediona 2014, hace ahora casi un año, y decidimos elegir esta pequeña gran joyita aprovechando la proximidad de la décima edición de esta gran fiesta de la cerveza y también que el hecho de que Benicarló es un pueblo marinero en el que el pulpo goza de especial admiración.



Y con este triplete de ases damos por cerrado nuestro particular #FFdA7, rememorando momentos pasados y con vistas hacia un futuro en el que espero que Valencia salga por fin de esas tinieblas que tantos años han hipotecado nuestro presente y futuro. Ahora tocará esperar la llegada de diciembre para un nuevo #FFdA guardando y envejeciendo más cervezas, pero hasta entonces...

Salut i bona birra!